El estrés laboral es la mayor amenaza actual para la Salud de los Trabajadores. La psicología del trabajo sigue profundizando en el concepto de salud psicosocial e investigando sobre los factores de riesgo psicosocial escondidos detrás de actitudes aparentemente productivas y positivas, como la pasión por el trabajo.

Conoce los Títulos Propios de THAEI y fórmate como «Especialista en Desarrollo del Talento Sostenible» para contribuir a prevenir los Factores de Riesgo Psicosocial que pasan desapercibidos para la Evaluación convencional. Descarga el PDF con toda la información detalladas sobre nuestros Programas Especialista en https://thaei.services/titulos-propios/

Descubrirás que existen dos tipos o formas de pasión por el trabajo con efectos muy diferentes en la satisfacción en el trabajo, la calidad de vida laboral y la salud y bienestar general de las personas. Si de verdad estamos creando empresas humanas, no es admisible aprovecharse de las formas de malestar difuso que redundan en una aparente productividad. Un Desarrollo Responsivo del Talento requiere ayudar  a las personas con Alto Rendimiento y/o Alto Potencial, a distinguir entre una pasión consciente y una pasión obsesiva por el trabajo. Esta diferenciación es crucial, ya que afecta a la salud psicológica y el bienestar de los trabajadores y abre nuevas perspectivas para la evaluación de riesgos psicosociales.

 

1. Pasión Armoniosa, sinónimo de Salud Laboral

La pasión consciente y armoniosa se caracteriza por un compromiso autónomo y equilibrado hacia el trabajo. Los trabajadores que experimentan este tipo de pasión tienden a:

  • Tener una percepción positiva de su lugar de trabajo: Se sienten más en control, reciben más apoyo de sus superiores y experimentan menos sobrecarga laboral (Lavigne et al., 2014, pp. 3-4,8).
  • Disfrutan de un bienestar psicológico así como de una experiencia de seguridad y salud: La pasión armoniosa está asociada con altos niveles de satisfacción laboral y bajos niveles de depresión(Houlfort et al., n.d., p. 1,14).

2. Pasión Obsesiva

Por otro lado, la pasión obsesiva se define como un compromiso rígido y controlador hacia el trabajo, donde la actividad se convierte en una parte central de la identidad del individuo. Esto puede llevar a varios riesgos psicosociales:

  • Experiencia de Sobrecarga y Estrés en el trabajo: Los trabajadores con pasión obsesiva tienden a sentirse sobrecargados de trabajo, lo que puede resultar en estrés y agotamiento(Lavigne et al., 2014, pp. 7–8).
  • Problemas de Salud Mental y Física asociados: La pasión obsesiva está relacionada con un aumento en los niveles de depresión y ansiedad, así como con un mayor riesgo de burnout y procesos psicosomáticos(Houlfort et al., n.d., p. 1,14).
  • Conflictos entre la Vida Laboral y Personal que puede conducir a la pérdida progresiva de redes y espacios de Apoyo Social: Este tipo de pasión puede generar conflictos en otras áreas de la vida, como la familia y las relaciones sociales, debido a la dedicación excesiva al trabajo(Lavigne et al., 2014, p. 3,7-8).
  • Menor Satisfacción Laboral y peor Organización del Trabajo: A pesar de la dedicación, los trabajadores obsesivamente apasionados pueden experimentar una menor satisfacción laboral en comparación con aquellos que tienen una pasión armoniosa(Houlfort et al., n.d., pp. 14–15).
  • Actitud Egosintónica y Resistencia al Cambio: Detrás de la pasión Obsesiva por el Trabajo hay una características psicológicas que hacen que la persona se identifique con su comportamiento y actitudes sobrecomprometidas, lo que conduce a menudo a una defensividad frente al Feedback del entorno, especialmente de familiares y seres queridos.

 

3. Implicaciones Organizacionales

Desde una perspectiva organizacional, es fundamental reconocer que la pasión por el trabajo puede tener tanto efectos positivos como negativos. Mientras que la pasión armoniosa y consciente puede fomentar un ambiente de trabajo saludable y productivo, la pasión obsesiva puede ofrecer resultados y obtener  mucho reconocimiento a corto plazo, mientras que silenciosamente lleva a un aumento en la rotación de personal, a un ambiente laboral tóxico y a agotar las capacidades y recursos psicológicos y emocionales,  tanto de la persona que muestra esta disposición como de quienes colaboran con ella. (Houlfort et al., n.d., p. 1,15)